Técnicas si su perro tira de la correa
Veamos primero por qué nuestro perro tira de la correa:
El perro tira de la correa por instinto: sigue un olor e ignora por completo todo lo que ocurre a su alrededor. Su olfato se dispara y su único objetivo es seguir el rastro y encontrar lo que busca.
El perro tira de la correa porque ha aprendido a hacerlo: inconscientemente, suele ser el dueño quien enseña al perro que puede tirar. Si el perro entiende que tirando sigue avanzando, ¿por qué parar?
El perro tira de la correa porque está demasiado excitado: de hecho, un perro que no está suficientemente ejercitado y sacado a pasear estará tan excitado durante estos raros momentos que no podrá canalizar su energía.
El perro tira de la correa porque no le escucha: la falta de relación entre la persona y el perro puede repercutir en su obediencia. Esto no significa que al perro no le guste su dueño, sino que el perro no confía lo suficiente en él y por lo tanto, no tiene «razones» para escuchar.
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Aquí tiene tres técnicas que le ayudarán a usted y a su perro a disfrutar de un agradable paseo:
Deje que su perro se desboque:
Un paseo con su perro no sigue un plan establecido. Hay que dejar que su perro se desahogue. Lo mejor es que pueda hacerlo al principio del paseo. Si su perro ha estado en casa esperando a que volviera del trabajo, es normal que esté excitado cuando llegue. Está feliz de verle de nuevo y sabe que saldrá pronto. Es más, probablemente esté deseando hacer sus necesidades. Por lo tanto, no debe esperar demasiado de él, ya que no está preparado para concentrarse y escucharle con calma. En su itinerario, prevea llegar rápidamente a un lugar donde pueda ser desatado donde podrá desahogarse y correr a su antojo. Esto liberará su energía y será más probable que le obedezca. Luego puede atarlo y dar un paseo con él.
Atire la atención de su perro:
El perro debe sentir que usted es omnipresente. Cuando tire en una dirección, vaya a la dirección opuesta, repitiendo siempre la misma orden: aquí o ven aquí. Lo importante es que su perro asocie la palabra con el gesto.
Todo es cuestión de perseverancia y repetición. Elógielo verbalmente y tambien cuando haga lo correcto. Esto ayudará a su perro a entender lo que quiere de él. También en este caso, asocie siempre una palabra a la acción: «bien, buen perro, bien hecho».
Corrija su postura:
Debe saber que los perros lo sienten todo. No sólo su entorno, sino también nuestro estado de ánimo y la forma en que nos mantenemos. Si está tenso antes de que empiece el paseo o ha tenido un mal día en el trabajo, se notará en la forma en que se sostiene y en la tensión que ejerce sobre la correa. Muchas personas están muy rígidas, con el brazo torcido a 90 grados como si sostuvieran una bolsa de diamantes. Por lo contrario tiene que tener una postura relajada con los brazos sueltos sin poner tension sobre la correa, con las rodillas ligeramente flexionadas y los pies firmemente plantados en el suelo.
Esto le ayudará también a que no pueda desequilibrarle.
Espero que estas 3 técnicas les ayude y que puedan disfrutar un buen paseo los dos.